¿Secuestrador o salvador? Clark y el síndrome de Estocolmo
POR: THALIA BALLESTEROS
14-05-2022 16:31:25
-"Si no puedo ser el mejor de los mejores, al menos puedo ser el mejor de los peores"
Clark Olofsson
¿Cómo un secuestrador puede ser tan entretenido de ver? ¿Cómo puedes empatizar con él? Esta es la historia de Clark que Netflix nos trajo recientemente.
Seguramente, has escuchado hablar del síndrome de Estocolmo: Trastorno psicológico temporal que aparece en la persona que ha sido secuestrada y que consiste en mostrarse comprensivo y benevolente con la conducta de los secuestradores e identificarse progresivamente con sus ideas, ya sea durante el secuestro o tras ser liberada.
Clark es una serie que gira en torno a Clark Olofsson, el famoso delincuente de Suecia que originó el término Síndrome de Estocolmo tras realizar infames delitos por todo el país, concretamente, el del robo de Norrmalmstorg. Olofsson es considerado como el primer gángster de Suecia.
Bill Skarsgård, interpretando a Clark, lo es todo. Se acomoda muy bien en el personaje y la pasa genial, se nota.
La serie de 6 capítulos, con una duración aproximada de 50 minutos cada uno, nos va contando cómo es, desde niño, alguien que trató de esconder sus verdaderas emociones para evitarse problemas, más que nada internos. Distorsionando sus recuerdos para poder pensar que tuvo una buena infancia. Pero no. De ahí partimos al por qué actúa de cierta manera cuidadosa y egoísta ante sucesos que le pueden cambiar la vida.
Su papá era alcohólico, machista a más no poder, con una esposa sumisa, con algún problema mental no tratado y golpeada constantemente por su marido. Nada bueno sale de esto.
Después Clark toma las riendas de su vida, pero bueno, el resto es historia.
Es una manera bizarra, divertida y triste de seguir los pasos de este delincuente de los años 60, famoso por el concepto que se adaptó a él, y por muchas historias de huidas de la cárcel, entre atracos y robar un banco con una botella… ¡tantas aventuras!
Tommy y Clark
Durante la serie, vemos cómo un policía busca siempre atraparlo, ya lo tiene en la mira, ya lo cachó con las manos en la masa pero, para suerte de Clark, en aquellos años había muchos permisos para salir de la cárcel algunos días, y la cuestión de la seguridad en ese entonces no era para nada eficiente, además de que vemos una extraña amistad entre ellos.
También hay romance
Clark dice que siempre se enamora. Y sí, lo podemos ver en el transcurso de los capítulos, con cada una de sus “parejas”, algunas hasta tuvieron la dicha de ser madre.
Este hombre tenía tanto amor para dar, sumando que era alguien atractivo, famoso y, claro, una labia incomparable para seducir.
Eso sí, una pequeña advertencia: es una serie con mucho, ¡pero mucho sexo!
Le doy 4.5 Thalíestrellas. Una serie bizarra, de la mezcla de décadas transcurridas, modas, estilos de vida y muchos, pero muchos atracos. Aunque se define como drama, realmente es muy divertida. Una experiencia visual atractiva, emocional y con mucha empatía, que podíamos esperar del creador del síndrome de Estocolmo.
-"Si no puedo ser el mejor de los mejores, al menos puedo ser el mejor de los peores"
Clark Olofsson
¿Cómo un secuestrador puede ser tan entretenido de ver? ¿Cómo puedes empatizar con él? Esta es la historia de Clark que Netflix nos trajo recientemente.
Seguramente, has escuchado hablar del síndrome de Estocolmo: Trastorno psicológico temporal que aparece en la persona que ha sido secuestrada y que consiste en mostrarse comprensivo y benevolente con la conducta de los secuestradores e identificarse progresivamente con sus ideas, ya sea durante el secuestro o tras ser liberada.
Clark es una serie que gira en torno a Clark Olofsson, el famoso delincuente de Suecia que originó el término Síndrome de Estocolmo tras realizar infames delitos por todo el país, concretamente, el del robo de Norrmalmstorg. Olofsson es considerado como el primer gángster de Suecia.
Bill Skarsgård, interpretando a Clark, lo es todo. Se acomoda muy bien en el personaje y la pasa genial, se nota.
La serie de 6 capítulos, con una duración aproximada de 50 minutos cada uno, nos va contando cómo es, desde niño, alguien que trató de esconder sus verdaderas emociones para evitarse problemas, más que nada internos. Distorsionando sus recuerdos para poder pensar que tuvo una buena infancia. Pero no. De ahí partimos al por qué actúa de cierta manera cuidadosa y egoísta ante sucesos que le pueden cambiar la vida.
Su papá era alcohólico, machista a más no poder, con una esposa sumisa, con algún problema mental no tratado y golpeada constantemente por su marido. Nada bueno sale de esto.
Después Clark toma las riendas de su vida, pero bueno, el resto es historia.
Es una manera bizarra, divertida y triste de seguir los pasos de este delincuente de los años 60, famoso por el concepto que se adaptó a él, y por muchas historias de huidas de la cárcel, entre atracos y robar un banco con una botella… ¡tantas aventuras!
Tommy y Clark
Durante la serie, vemos cómo un policía busca siempre atraparlo, ya lo tiene en la mira, ya lo cachó con las manos en la masa pero, para suerte de Clark, en aquellos años había muchos permisos para salir de la cárcel algunos días, y la cuestión de la seguridad en ese entonces no era para nada eficiente, además de que vemos una extraña amistad entre ellos.
También hay romance
Clark dice que siempre se enamora. Y sí, lo podemos ver en el transcurso de los capítulos, con cada una de sus “parejas”, algunas hasta tuvieron la dicha de ser madre.
Este hombre tenía tanto amor para dar, sumando que era alguien atractivo, famoso y, claro, una labia incomparable para seducir.
Eso sí, una pequeña advertencia: es una serie con mucho, ¡pero mucho sexo!
Le doy 4.5 Thalíestrellas. Una serie bizarra, de la mezcla de décadas transcurridas, modas, estilos de vida y muchos, pero muchos atracos. Aunque se define como drama, realmente es muy divertida. Una experiencia visual atractiva, emocional y con mucha empatía, que podíamos esperar del creador del síndrome de Estocolmo.