La entrega del Ariel 2020 se acerca y aunque la Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas (AMACC) tuvo que posponer la entrega de premios que tradicionalmente se realiza el mes de mayo debido a la pandemia COVID19, el máximo reconocimiento al cine mexicano se llevará a cabo el próximo 27 de septiembre de manera virtual a través de Canal 22 y redes sociales.

Para conocer más del trabajo de quienes realizan el cine mexicano y de quienes este año compiten en alguna de las categorías, las AMACC está realizando la serie Conversando con los Nominados al Ariel 2020, donde a través de una reunión virtual transmitida en las redes sociales de la Academia, los nominados nos comparten su sentir por estar nominados, hablan de los personajes que les merecieron este reconocimiento y de sus inquietudes sobre la actuación y el cine mexicano.

En esta primera entrega, compartiremos con ustedes las reflexiones de los nominados en la categoría de Mejor Actor: Luis Alberti (Mano de obra), Benny Emmanuel (Chicuarotes); Xabiani Ponce de León (Esto no es Berlín) y Armando Hernández (La paloma y el lobo), también está nominado José María Yázpik (Polvo), aunque él no estuvo en la charla organizada por la AMACC.

LUIS ALBERTI | MANO DE OBRA

Con más de una década de trayectoria como actor, Luis Alberti recibe su segunda nominación al Ariel por Mano de Obra, cinta dirigida por David Zonana –en 2015 estuvo nominado en Coactuación Masculina por Carmín Tropical–. Mano de Obra tuvo su estreno en el Festival Internacional de Cine de Morelia 2019, donde obtuvo el Premio a Mejor Actor.

“Lo que más disfrutaba de mi personaje en Mano de obra es decir que era un hombre muy bueno, comprender lo que significa ser pisoteado y después defender el sentido de pertenencia, la dignidad y el derecho que tienes de tener algo por tu trabajo y que te hagas justicia por ti mismo. Este personaje me permitió pasar por muchos lugares donde yo decía ´si porque lo merezco, porque lo hago con mis manos´, esa sensación que nos ha sido muy robada a los mexicanos en muchos ámbitos de la vida y el trabajo, me apasionaba ese sentimiento de dignificación”.

“Yo siempre he pensado que el espectador está listo para consumir todo tipo de cine, está ávido de consumir otro tipo de contenidos, y en este momento se puede dar el encuentro entre el espectador y quienes hacen cine, lo cual se debe sobre todo a la necesidad de la gente de encontrarse con el cine que se hace en México, creo que se está demostrando que no es que el espectador no quiera ver cine mexicano, sino que no lo conocía”.

“Para mí recibir en este momento una nominación al Ariel significa el abrazo, el reto y la oportunidad de refrendar mi compromiso con toda la gente que está luchando por el cine, con mi pasión por este trabajo que he realizado por años (…) para mí el Ariel es una manera de promocionar nuestro cine, de decir aquí estamos, somos lo que somos, es una manera de hacernos más fuertes, aunque un Ariel también nos pone mayores retos para replantearnos el horizonte hacia dónde queremos caminar”.  

“Mano de obra tiene dos grandes aristas: por un lado, comenzamos planteando un drama con una premisa social que refleja la injusticia en el ámbito laboral y a partir de esto plantea una reflexión ética donde nos preguntamos cómo reaccionamos los mexicanos ante la injusticia y los cotos de poder. La película refleja muy bien cómo somos los mexicanos como sociedad”.

ARMANDO HERNÁNDEZ | LA PALOMA Y EL LOBO

Con cerca de 60 trabajos como actor de cine y televisión, Armando Hernández nos sorprendió en la cinta Amarte Duele (2002), por la que obtuvo su primera nominación al Ariel como Mejor Coactuación Masculina. Entre las películas en las que ha participado destacan Ladies´Night, El búfalo de la noche, Rudo y Cursi, Año bisiesto y Las Oscuras Primaveras, por mencionar algunas. En La Paloma y el Lobo, dirigida por Carlos Lenin, Armando interpreta al Lobo en una historia inmersa en el narcotráfico, sin que la violencia explícita sea la protagonista, más bien se centra en una pareja que busca sobrevivir en medio de este contexto y de la zozobra.

“Cuando La Paloma y el Lobo llegó a mí, la tomé como una oportunidad para crear y reinventarme, lo que más disfrute fue el trabajo día a día con mis compañeros, su frescura, la mayoría son jóvenes, es la ópera prima de Carlos Lenin, había mucha responsabilidad en todo el equipo y yo tenía que estar a su altura, ellos pensaban que yo era el actor con experiencia, pero la naturalidad de Paloma me hizo recordar mis inicios en esta carrera. Esta película también me recordó que la violencia es algo que vivimos como mexicanos todos los días”.

“Recibir esta nominación al Ariel para mi viene acompañada de una reivindicación de lo que he hecho a lo largo de mi carrera, viene con un sentido de pertenencia y de origen, mi carrera comenzó en el cine y regresar 20 años después para ser reconocido por la Academia y mis compañeros es motivo para abrazarse, pero también para tomar conciencia de mi origen, de cómo empecé y lo que quiero seguir haciendo porque me apasiona. Me siento privilegiado de poder ser la voz, el cuerpo, la herramienta para una contar historias”.

“Creo que el cine siempre ha sido un reflejo de la sociedad y una ventana para la identificación, las historias vienen a sumar, aunque no siempre han existido las ventanas para su exhibición, la lucha constante es contra las películas de Estados Unidos que no dejan espacios para el cine mexicano, pero siempre ha habido diversidad en el cine mexicano. Necesitamos romper con los estigmas de que el cine mexicano siempre son las mismas historias”.

BENNY EMMANUEL | CHICUAROTES

A su corta edad, 23 años, Benny Emmanuel ha tenido una destacada presencia en el cine mexicano, en 2019 obtuvo el Ariel a Revelación Actoral por su trabajo en la cinta De la Infancia, de Carlos Carrera, así como el Premio Mezcal a Mejor Actor en el Festival de Cine en Guadalajara por su interpretación en Detrás de la Montaña, de David Romay. Este año está nominado a Ariel como Mejor Actor por su papel de “Cagalera”, un adolescente que vive en uno de los barrios más pobres de la Ciudad de México y busca salir de ahí, aunque para ello deba delinquir y enfrentar la cruda realidad en la que le tocó vivir.

“El cine me ha permitido entender que las historias con sustancia, las que nos reflejan como sociedad y que reflejan los problemas sociales, son las que valen la pena contar, esas son las que actualmente están en el cine y es algo que se agradece, además de que el público está más abierto a ver otro tipo de historias en pantalla, con personajes de verdad”.

“Chicuarotes toma un tema universal, aunque pudiera parecer muy local, es la historia de un joven que nace en un lugar en el que odia vivir, él quiere salir de ese lugar y para hacerlo toma las herramientas que él conoce, con las que ha crecido: violencia, falta de empatía, al final creo que Cagalera trata de huir de él mismo y su historia se convierte en un espiral infinito “.

“La nominación me tomó por sorpresa, no sabíamos si se realizaría la entrega del Ariel, pero sin duda es un reconocimiento bien padre que se abraza y se quiere mucho porque es el reconocimiento de tus compañeros.  Creo que este tipo de apapachos al alma y te confirman que estás en el lugar correcto, en lo personal, me da un sentido de pertenencia”

XABIANI PONCE DE LEÓN | ESTO NO ES BERLÍN

La carrera actoral de Xiabani Ponce se ha desarrollado en mayor medida en teatro y televisión, fue a través de casting que Hari Sama lo eligió para ser el protagónico de Esto no es Berlín, que le ha valido su primera nominación al Ariel como Mejor Actor. Un gran reto al tratarse de una película autobiográfica del director, en el que Xabiani interpreta a Carlos, un adolescente que busca encontrase a sí mismo, en un ambiente de la libertad sexual, sexo, drogas y rock and roll .

“Mi personaje en Esto no es Berlín es un adolescente que sufre de abandono, que está con una mamá ausente, y el personaje tiene este sentido de no pertenencia que lo lleva a meterse a un grupo que aunque no lo convence del todo él simplemente quiere ser participé de algo. Ese grupo de artistas le cambia su mundo y la manera de pensar, pero se enfrentan a la discriminación, algo muy latente tanto como hace 40 años, creo que es un tema que sigue muy vigente, la lucha no solo por la tolerancia sino por el respeto”.

“Aunque es una película situada a principios de los 80 y retrata la escena artística underground en la Ciudad de México, creo que es una historia actual por esa búsqueda de la identidad y encontrar el sentido de la vida, el retrato de las personas que luchan por su libertad y eso es algo de lo que hay que hablar para no repetirlo”

“Para mí estar nominado al Ariel ya es un premio en sí, no me lo esperaba, estar al lado de grandes actores es para mí un gran honor, esta es mi primera película y estoy muy consciente de que mis compañeros tienen mucha más experiencia, pero sé que esta nominación puede cambiar el rumbo de mi carrera”.

JOSÉ MARÍA YAZPIK | POLVO

Polvo es la ópera prima de José María Yazpik y le ha valido ser nominado al Ariel no solo como Mejor Actuación Masculina, también como Mejor Director, Mejor Guión Original y Mejor Ópera Prima. Esta es su segunda nominación a los premios de la Academia, luego de que en 2006 recibió la estatuilla como Mejor Coactuación Masculina por su trabajo en Las vueltas del citrillo. 

Yazpik no participó en la conversación organizada por la AMACC, pero conversó con Encuadres en el pasado Festival Internacional de Cine de Morelia, donde presentó su película por primera vez:  “Polvo no es una película sobre el narcotrafico, es una comedia de reencuentros, que reflexiona sobre las decisiones que tomamos en la vida y sus consecuencias, en un pueblo muy particular que es donde nació y creció mi padre”. 

“Realizar esta película fue una experiencia muy enriquecedora, muy gozosa para todos, para el pueblo, para el crew y para el elenco porque la gente del lugar nos abrió los brazos, nos apoyó y fue parte de la película”.