NO NOS MOVERÁN: La belleza dentro de la tragedia
POR: FERNANDA LOZADA
20-06-2024 20:11:47
Existen muchas aproximaciones a uno de los eventos más terribles e inhumanos que ha azotado México, la matanza de Tlatelolco el 2 de octubre de 1968; está más que claro el porqué de tantos ejemplos y perspectivas sobre un mismo acontecimiento, debemos estudiar y abordar para nunca olvidar y sobre todo para jamás repetir; NO NOS MOVERÁN es una de las obras más completas que retrata los estragos de esta tragedia y lo hace con respeto y cariño, sin necesidad de recrear directamente los hechos, si no que los explora a través de la memoria y es que ahí permanecen frescos, punzantes, sangrantes, vivos, pero esta película no solo tiene como tema central este hecho, al contrario, éste es sólo el detonante porque lo que realmente vemos es un resultado insólito y un proceso duro que demuestra que efectivamente existe la belleza dentro de la tragedia.
Socorro es una mujer dura, abogada poco sonriente y testigo demasiado cercana de la violencia ejercida contra los estudiantes mexicanos en la explanada de la Plaza de las Tres Culturas en 1968. Conocemos poco a poco la rutina diaria y vida de Socorro quien vive en el conjunto habitacional de Tlatelolco en compañía de su tía, una señora de la tercera edad que no tiene una muy buena relación con ella, su hijo Jorge y su nuera Lucía.
Algo carcome al personaje de Socorro (Luisa Huertas) y es que vive penando la muerte de su hermano Jorge, 'Coque', a manos de los militares que atacaron al movimiento estudiantil, la injusticia que rodea al caso la mantiene intranquila y no le permite alcanzar la plenitud que debería tener a su edad y con su experiencia, ha vivido con dolor y en un incesante luto, sin embargo, gracias a su profesión se ha hecho de contactos influyentes en el mundo de las leyes y el gobierno, consiguiendo a través de favores el nombre del soldado específico que prescindió de la vida de su hermano.
Con extremo cuidado y minuciosa atención Socorro se dispone a vengar a Jorge bajo la ley universal de “ojo por ojo”, con este plan en mente, conocemos a varios personajes que demuestran su lealtad a la protagonista que definitivamente está determinada a cumplir con su cometido por el gran amor que le tiene a Jorge aunque él ya no esté. Durante su planeación entendemos más a Coco como persona, sus problemas y relaciones, el cómo se expresa y su sentir, incluso la película juega con mucha metáforas tales como la alegoría a la venganza mostrando la línea narrativa de un gato que caza un ave y el castigo para el perpetrador, así como la idea de la reencarnación o una señal de aliento y apoyo a través de una paloma blanca.
El personaje principal nos lleva a través de su viaje de sanación inicialmente disfrazado como venganza para después descubrir que Socorro tiene una virtud mayor y más allá de su determinación falsamente motivada por amor, ella tiene la capacidad de soltar y de alguna manera perdonar tanto a otros como a sí misma, logrando así un objetivo precioso a raíz de un evento devastador.
NO NOS MOVERÁN habla sobre la humanidad en el peor de los contextos, sobre la importancia de no aferrarse al pasado por más que duela y a apreciar a los que aún permanecen a nuestro lado.
La narrativa de la película acapara la atención pero técnicamente es también una pieza divina, la fotografía que apoya todo el tiempo a la historia y a la sensación que busca evocar con un blanco y negro nostálgico y una imagen preciosista, una construcción sonora envolvente y sobre todo un trabajo de actuación y dirección impecables, una cinta indiscutiblemente memorable, bien lograda y entrañable.
NO NOS MOVERÁN se alzó como la indiscutible y muy merecida ganadora del premio a Mejor Película en el Festival Internacional de Cine en Guadalajara.
Existen muchas aproximaciones a uno de los eventos más terribles e inhumanos que ha azotado México, la matanza de Tlatelolco el 2 de octubre de 1968; está más que claro el porqué de tantos ejemplos y perspectivas sobre un mismo acontecimiento, debemos estudiar y abordar para nunca olvidar y sobre todo para jamás repetir; NO NOS MOVERÁN es una de las obras más completas que retrata los estragos de esta tragedia y lo hace con respeto y cariño, sin necesidad de recrear directamente los hechos, si no que los explora a través de la memoria y es que ahí permanecen frescos, punzantes, sangrantes, vivos, pero esta película no solo tiene como tema central este hecho, al contrario, éste es sólo el detonante porque lo que realmente vemos es un resultado insólito y un proceso duro que demuestra que efectivamente existe la belleza dentro de la tragedia.
Socorro es una mujer dura, abogada poco sonriente y testigo demasiado cercana de la violencia ejercida contra los estudiantes mexicanos en la explanada de la Plaza de las Tres Culturas en 1968. Conocemos poco a poco la rutina diaria y vida de Socorro quien vive en el conjunto habitacional de Tlatelolco en compañía de su tía, una señora de la tercera edad que no tiene una muy buena relación con ella, su hijo Jorge y su nuera Lucía.
Algo carcome al personaje de Socorro (Luisa Huertas) y es que vive penando la muerte de su hermano Jorge, 'Coque', a manos de los militares que atacaron al movimiento estudiantil, la injusticia que rodea al caso la mantiene intranquila y no le permite alcanzar la plenitud que debería tener a su edad y con su experiencia, ha vivido con dolor y en un incesante luto, sin embargo, gracias a su profesión se ha hecho de contactos influyentes en el mundo de las leyes y el gobierno, consiguiendo a través de favores el nombre del soldado específico que prescindió de la vida de su hermano.
Con extremo cuidado y minuciosa atención Socorro se dispone a vengar a Jorge bajo la ley universal de “ojo por ojo”, con este plan en mente, conocemos a varios personajes que demuestran su lealtad a la protagonista que definitivamente está determinada a cumplir con su cometido por el gran amor que le tiene a Jorge aunque él ya no esté. Durante su planeación entendemos más a Coco como persona, sus problemas y relaciones, el cómo se expresa y su sentir, incluso la película juega con mucha metáforas tales como la alegoría a la venganza mostrando la línea narrativa de un gato que caza un ave y el castigo para el perpetrador, así como la idea de la reencarnación o una señal de aliento y apoyo a través de una paloma blanca.
El personaje principal nos lleva a través de su viaje de sanación inicialmente disfrazado como venganza para después descubrir que Socorro tiene una virtud mayor y más allá de su determinación falsamente motivada por amor, ella tiene la capacidad de soltar y de alguna manera perdonar tanto a otros como a sí misma, logrando así un objetivo precioso a raíz de un evento devastador.
NO NOS MOVERÁN habla sobre la humanidad en el peor de los contextos, sobre la importancia de no aferrarse al pasado por más que duela y a apreciar a los que aún permanecen a nuestro lado.
La narrativa de la película acapara la atención pero técnicamente es también una pieza divina, la fotografía que apoya todo el tiempo a la historia y a la sensación que busca evocar con un blanco y negro nostálgico y una imagen preciosista, una construcción sonora envolvente y sobre todo un trabajo de actuación y dirección impecables, una cinta indiscutiblemente memorable, bien lograda y entrañable.
NO NOS MOVERÁN se alzó como la indiscutible y muy merecida ganadora del premio a Mejor Película en el Festival Internacional de Cine en Guadalajara.