Mundos Cósmicos: Comedia romántica lisérgica
POR: FERNANDA LOZADA
22-04-2024 18:09:07
Se dice que ya nada es original, que todo ha sido contado y, es en parte verdad, sin embargo, lo que hace que sigamos consumiendo historias es la perspectiva y la forma en la que se narran. Mundos Cósmicos es una película que decide retratar como muchas otras a una pareja que está inevitablemente destinada al fracaso pero decide hacerlo desde un lugar particular y con elementos poco explorados en el cine nacional sin dejar de lado el tono y la naturaleza de su propio guion, conformando así una comedia romántica lisérgica.
Para el cine mexicano comercial no es sorpresa encontrarse con otra película de este género pero lo que vuelve distinta a esta del montón es su forma; Sergio Tovar, su director, decide contarnos la historia de Memo y Valeria, interpretados por Jorge Luis Moreno y Elizabeth Valdez, respectivamente, una pareja cuyas circunstancias y personalidades les juegan en contra pese al gran cariño que se tienen, nada nuevo hasta ahí pero esto se lo cuentan al espectador a través de un episodio específico en sus vidas; Memo cumple treinta años y le pide a Valeria que de regalo experimenten juntos los efectos de una droga psicotrópica, juntos bajo los efectos de la misma serán capaces de ver y sentir cosas inimaginables así como de sincerarse con el propósito de mejorar sus propios lazos.
Siempre volviendo al momento del “viaje” vamos conociendo a la pareja y su cotidianidad, los motivos por los que han llegado al punto de quiebre y todo con una sensación de comedia amena y sencilla que vuelve a la película un material con el que muchos pueden empatizar deuna forma u otra. Los personajes están escritos meticulosamente bajo los preceptos y necesidades del género, con vicios y virtudes claras, la trama sucede con momentos particularmente graciosos de forma que al llegar a los puntos más serios entendamos porqué son así.
Memo es un treintañero sin trabajo, artista frustrado que vive en casa de su madre quien es una mujer conservadora preocupada por el futuro de su hijo al paso que va y que además no es particularmente entusiasta de la novia ni de la relación de Memo. Su personalidad crédula y positivista llevan a este personaje a situaciones donde sale perdiendo pero algo que sabe que consiguió con éxito es a su pareja, Valeria.
Valeria es una mujer independiente y centrada que se deja llevar por el amor que le tiene a Memo pero se ha ido decepcionando ante su estancamiento y falta de iniciativa, ella ha estado soportando malos tratos por parte de su suegra y perdidas financieras al tratar de apoyar a su novio en negocios imposibles. La situación ha llegado a un punto sin retorno y es aquí cuando entra en acción el plan alucinógeno.
Durante este episodio podemos observar a la pareja discutir y expresar sus verdaderos sentimientos, lamentos e intenciones pero es en este momento cuando la película decide explotar su elemento lisérgico, experimentamos junto a los personajes los efectos de esta sustancia, se oferta una verdadera experiencia a través de lo visual y auditivo consiguiendo un efecto interesante en el espectador y construyendo un mensaje bastante poético sobre el amor y sobre soltar, sobre cuidar y procurar al otro incluso si eso significa alejarse.
Mundos Cósmicos es una película ligerita pero de mensajes contundentes que utiliza la comedia como medio pero también lo experimental para transmitir de forma más original e interpretativa algo que muchas otras han intentado desde lo ya conocido y es en sí una alegoría de un “viaje”, un trayecto de descubrimiento buscando experimentar y entender algo tan complejo como las sensaciones extracorpóreas, la sinestesia o en este caso también lo que significa verdaderamente el amor.
Se dice que ya nada es original, que todo ha sido contado y, es en parte verdad, sin embargo, lo que hace que sigamos consumiendo historias es la perspectiva y la forma en la que se narran. Mundos Cósmicos es una película que decide retratar como muchas otras a una pareja que está inevitablemente destinada al fracaso pero decide hacerlo desde un lugar particular y con elementos poco explorados en el cine nacional sin dejar de lado el tono y la naturaleza de su propio guion, conformando así una comedia romántica lisérgica.
Para el cine mexicano comercial no es sorpresa encontrarse con otra película de este género pero lo que vuelve distinta a esta del montón es su forma; Sergio Tovar, su director, decide contarnos la historia de Memo y Valeria, interpretados por Jorge Luis Moreno y Elizabeth Valdez, respectivamente, una pareja cuyas circunstancias y personalidades les juegan en contra pese al gran cariño que se tienen, nada nuevo hasta ahí pero esto se lo cuentan al espectador a través de un episodio específico en sus vidas; Memo cumple treinta años y le pide a Valeria que de regalo experimenten juntos los efectos de una droga psicotrópica, juntos bajo los efectos de la misma serán capaces de ver y sentir cosas inimaginables así como de sincerarse con el propósito de mejorar sus propios lazos.
Siempre volviendo al momento del “viaje” vamos conociendo a la pareja y su cotidianidad, los motivos por los que han llegado al punto de quiebre y todo con una sensación de comedia amena y sencilla que vuelve a la película un material con el que muchos pueden empatizar deuna forma u otra. Los personajes están escritos meticulosamente bajo los preceptos y necesidades del género, con vicios y virtudes claras, la trama sucede con momentos particularmente graciosos de forma que al llegar a los puntos más serios entendamos porqué son así.
Memo es un treintañero sin trabajo, artista frustrado que vive en casa de su madre quien es una mujer conservadora preocupada por el futuro de su hijo al paso que va y que además no es particularmente entusiasta de la novia ni de la relación de Memo. Su personalidad crédula y positivista llevan a este personaje a situaciones donde sale perdiendo pero algo que sabe que consiguió con éxito es a su pareja, Valeria.
Valeria es una mujer independiente y centrada que se deja llevar por el amor que le tiene a Memo pero se ha ido decepcionando ante su estancamiento y falta de iniciativa, ella ha estado soportando malos tratos por parte de su suegra y perdidas financieras al tratar de apoyar a su novio en negocios imposibles. La situación ha llegado a un punto sin retorno y es aquí cuando entra en acción el plan alucinógeno.
Durante este episodio podemos observar a la pareja discutir y expresar sus verdaderos sentimientos, lamentos e intenciones pero es en este momento cuando la película decide explotar su elemento lisérgico, experimentamos junto a los personajes los efectos de esta sustancia, se oferta una verdadera experiencia a través de lo visual y auditivo consiguiendo un efecto interesante en el espectador y construyendo un mensaje bastante poético sobre el amor y sobre soltar, sobre cuidar y procurar al otro incluso si eso significa alejarse.
Mundos Cósmicos es una película ligerita pero de mensajes contundentes que utiliza la comedia como medio pero también lo experimental para transmitir de forma más original e interpretativa algo que muchas otras han intentado desde lo ya conocido y es en sí una alegoría de un “viaje”, un trayecto de descubrimiento buscando experimentar y entender algo tan complejo como las sensaciones extracorpóreas, la sinestesia o en este caso también lo que significa verdaderamente el amor.