El cine extranjero, el gringo para ser más específicos, nos ha establecido una pauta en muchos aspectos como espectadores, desde el ritmo hasta el tipo de historias y la idea de la realidad, sin embargo, si algo debe aspirar a ser el cine es diverso. Con nuevas propuestas hemos empezado a consumir producciones que se alejan de los cánones conocidos del cine comercial, entre estas opciones encontramos géneros y formas. Donde duermen los pájaros trae un nuevo ángulo del subgénero 'coming of age', historias donde somos testigos del crecimiento holístico de un personaje, esta película mexicana retrata una verdad con la que muchas juventudes pueden identificarse plenamente por varios motivos, obteniendo así un coming of age cercano a nuestra realidad.

Donde duermen los pájaros está hecha para juventudes latinoamericanas, mexicanas puntualmente, las propuestas ya existentes de estas historias hablan y muestran generalmente realidades muy alejadas del contexto de varios pero este no es el caso, pues, toda la película retrata paisajes, ambientes y situaciones de la vida diaria de una gran parte de la población y todo sin perder la ensoñación de la que es capaz el cine. 

Un pequeño fragmento de la vida de un adolescente mexicano zacatecano es lo que narra esta historia, conocemos su contexto emocional, social y económico con lo que empatizamos fácilmente como connacionales, sin embargo, esto no es el hilo central de la trama, acá tenemos acceso directo a la mente del personaje, su forma tan particular de ver la vida y hasta sus sueños, Leonardo vive diferentes experiencias propias de su edad y de la transición de la niñez a la adolescencia, experimenta el amor y el desamor, la amistad, las carencias y la característica sensación de incomprensión por parte de lo que parece ser el mundo entero.

Durante una hora y 40 minutos somos deponentes de una realidad onírica, con momentos de verdad pura y otros de fantasía y ensoñación, retratos de espacios desde una perspectiva magnífica que los vuelve irreales, hermanas lejanas que levitan, caballos blancos en cuevas abandonadas y hombres que deambulan por las calles pregonando poesía y matemática. La película está plagada de referencias y alegorías dignas de visitar más de una vez para descifrarlas y darles un significado propio. 

El ritmo que decide darle Alejandro Alatorre, el director, a su película habla y transmite mucho de la valentía y la apuesta que representa su obra, podría ser y parecer de pronto para algunos que la cinta es lenta o que no pasa nada pero es importante tener en cuenta que existen aquellas películas que son más contemplativas y preciosistas en su núcleo, el retrato de un breve episodio en la vida de alguien puede ser muy interesante y conmovedor, así como capaz de dar pie a la interpretación y sobre todo a la reflexión de la realidad de muchos en diversos aspectos desde lo personal hasta lo social. 

Donde duermen los pájaros ya se encuentra en salas selectas y es una creación mexicana diferente y atrevida para comenzar a consumir un cine distinto y de análisis.