La Cartelera en Corto. Primer fin de semana de enero 2024
POR: JAVIER QUINTANAR POLANCO
06-01-2024 13:59:08
Antes que nada, quiero agradecer a Revista Encuadres por abrirme este espacio en el cual, semana con semana, comentaremos brevemente los principales estrenos de la cartelera comercial, a reserva de que alguno de los colaboradores (o un servidor) escriba una crítica más extensa sobre alguno de los títulos mencionados. Así que sin más preámbulos, comencemos:
Aguas siniestras (Night Swim, Estados Unidos, 2024) de Bryce McGuire.
La primera producción del 2024 estrenada en nuestro país, es un filme de suspenso y horror emanado de los estudios Blumhouse; en el cual una familia quien recién se mudó a una residencia provista de una enorme piscina, descubre que en esta última ocurren cosas extrañas, formidables y aterradoras. Variante de la casa embrujada o maldita que recicla algunos elementos de filmes clásicos como Poltergeist: Juegos diabólicos (Hooper, 1982) o El Horror de Amityville (Rosenberg, 1979). Poca originalidad y una premisa que de entrada suena ridícula, pero el novel director y guionista McGuire logra que, al menos, el asunto sea entretenido.
Dogman (DogMan, Francia, 2023) de Luc Besson.
Besson regresa a la pantalla grande con un filme multigenérico donde convergen diversos elementos, para contar la trágica y la vez insólita historia de un personaje el cual quedó traumatizado y lisiado de por vida a consecuencia de una serie de abusos sufridos en la infancia, y quien encontró consuelo en la música, y en el amor y empatía brindados por los perros. Un filme excesivo y extravagante que sin embargo funciona gracias tanto al buen oficio de Besson, como a la fenomenal actuación de Caleb Landry Jones en el estelar.
Los tres mosqueteros: Milady (Les Trois Mousquetaires: Milady, Francia, 2023) de Martin Bourboulon.
Continuando justo en donde el relato se quedó en la primera entrega, está secuela abunda en el pasado de la misteriosa Milady de Winter (Eva Green) develando algunos de los propósitos de sus conspiraciones, al mismo tiempo que sigue las repercusiones del atentado fallido en contra de Luis XIII (Louis Garrel), y revela el paradero de Constance Bonacieux (Lyna Khoudri). Al igual que su predecesora, se trata de un filme de acción a la vieja escuela, combinado con intriga y suspenso. Un entretenimiento ideal para todos los gustos, y desde luego para los que quedaron fascinados con la precuela.
No quiero ser polvo (México, 2022) de Iván Löwenberg.
Bego es una mujer mayor cuyo hijo ya es independiente, y quien intenta llevar una vida saludable, haciendo ejercicio y uniéndose a un grupo que practica meditación. Obsesionada con el pensamiento mágico y la mística new age, dicho grupo inocula en su mente una idea la cual termina por obsesionarle: que vendrán tres días de oscuridad y junto con ellos, el fin del mundo. Con estos elementos, Löwenberg crea un filme minimalista en el cual reflexiona sobre el fanatismo, la fe ciega, las fake news y sobre todo, el miedo a la soledad y la intrascendencia.
Operación Hunt (Hunt, Corea del Sur, 2022) de Lee Jung-jae.
Tras un fallido atentado en contra del presidente de su país, los servicios secretos coreanos se ponen en alerta máxima, para tratar de descubrir al autor o autores intelectuales del mismo. Durante un operativo, reciben el pitazo sobre la presencia de un informante oculto en sus propias filas, y ello desatará una búsqueda frenética para tratar de ubicarlo y exponerlo. Se trata de un eficaz filme que combina la acción con el suspenso, en el que quizás el único requisito que el espectador debe de cumplir, es conocer un poco de la historia sociopolítica coreana de años recientes. Una prueba más de la buena salud que actualmente tiene el cine proveniente de ese país.
Priscilla (Estados Unidos, 2023) de Sofia Coppola.
El nuevo trabajo de Sofia Coppola está basado en el libro Elvis and Me escrito por Priscilla Presley, en el cual esta última relata su vida romántica y sus vivencias al lado de su famoso esposo. En su película, Coppola ofrece una mirada eminentemente feminista a la relación sostenida entre su protagonista (encarnada aquí por Cailee Spaeny), pero de manera simultánea desacraliza la figura del llamado “rey del rock and roll” (interpretado por Jacob Elordi), yendo a contracorriente de lo narrado por Baz Luhrmann en Elvis, su filme del 2022, concibiendo aquí un relato menos grandilocuente que el de Luhrmann, pero mucho más profundo e inquisitivo.
Tenéis que venir a verla (España, 2022) de Jonás Trueba.
Después de que la peor etapa de la pandemia ha pasado, una pareja invita a otra pareja de amigos a una comida, con el fin de que éstos últimos conozcan su nuevo domicilio. Y mientras comen, beben, juegan y en general pasan un día apacible, charlan tanto de cosas banales, como de temas más complejos, relacionados con la vida y su sentido. Un trabajo austero de Jonás Trueba que pareciese una mera bagatela, pero con una ligereza y lirismo frescos y agradables.
Uma & Haggen: Princesa y vikingo (México, 2023) de Benito Fernández.
El otro de los dos primeros estrenos mexicanos de este año es un filme de animación el cual transcurre en un universo distópico, donde una joven princesa de un pueblo originario y un niño vikingo, tratarán de salvar a su mundo tanto de un cataclismo como de las perversas maquinaciones de un grupo de villanos. Aunque su animación tiene calidad y algunos de sus personajes son visualmente atractivos, su lado flojo reside en el un tanto escaso desarrollo de personajes, en una trama elemental y algo incoherente, y en general, a un desarrollo argumental y dramático no del todo logrado, por lo que resulta un producto sólo ideal para niños muy pequeños.
Antes que nada, quiero agradecer a Revista Encuadres por abrirme este espacio en el cual, semana con semana, comentaremos brevemente los principales estrenos de la cartelera comercial, a reserva de que alguno de los colaboradores (o un servidor) escriba una crítica más extensa sobre alguno de los títulos mencionados. Así que sin más preámbulos, comencemos:
Aguas siniestras (Night Swim, Estados Unidos, 2024) de Bryce McGuire.
La primera producción del 2024 estrenada en nuestro país, es un filme de suspenso y horror emanado de los estudios Blumhouse; en el cual una familia quien recién se mudó a una residencia provista de una enorme piscina, descubre que en esta última ocurren cosas extrañas, formidables y aterradoras. Variante de la casa embrujada o maldita que recicla algunos elementos de filmes clásicos como Poltergeist: Juegos diabólicos (Hooper, 1982) o El Horror de Amityville (Rosenberg, 1979). Poca originalidad y una premisa que de entrada suena ridícula, pero el novel director y guionista McGuire logra que, al menos, el asunto sea entretenido.
Dogman (DogMan, Francia, 2023) de Luc Besson.
Besson regresa a la pantalla grande con un filme multigenérico donde convergen diversos elementos, para contar la trágica y la vez insólita historia de un personaje el cual quedó traumatizado y lisiado de por vida a consecuencia de una serie de abusos sufridos en la infancia, y quien encontró consuelo en la música, y en el amor y empatía brindados por los perros. Un filme excesivo y extravagante que sin embargo funciona gracias tanto al buen oficio de Besson, como a la fenomenal actuación de Caleb Landry Jones en el estelar.
Los tres mosqueteros: Milady (Les Trois Mousquetaires: Milady, Francia, 2023) de Martin Bourboulon.
Continuando justo en donde el relato se quedó en la primera entrega, está secuela abunda en el pasado de la misteriosa Milady de Winter (Eva Green) develando algunos de los propósitos de sus conspiraciones, al mismo tiempo que sigue las repercusiones del atentado fallido en contra de Luis XIII (Louis Garrel), y revela el paradero de Constance Bonacieux (Lyna Khoudri). Al igual que su predecesora, se trata de un filme de acción a la vieja escuela, combinado con intriga y suspenso. Un entretenimiento ideal para todos los gustos, y desde luego para los que quedaron fascinados con la precuela.
No quiero ser polvo (México, 2022) de Iván Löwenberg.
Bego es una mujer mayor cuyo hijo ya es independiente, y quien intenta llevar una vida saludable, haciendo ejercicio y uniéndose a un grupo que practica meditación. Obsesionada con el pensamiento mágico y la mística new age, dicho grupo inocula en su mente una idea la cual termina por obsesionarle: que vendrán tres días de oscuridad y junto con ellos, el fin del mundo. Con estos elementos, Löwenberg crea un filme minimalista en el cual reflexiona sobre el fanatismo, la fe ciega, las fake news y sobre todo, el miedo a la soledad y la intrascendencia.
Operación Hunt (Hunt, Corea del Sur, 2022) de Lee Jung-jae.
Tras un fallido atentado en contra del presidente de su país, los servicios secretos coreanos se ponen en alerta máxima, para tratar de descubrir al autor o autores intelectuales del mismo. Durante un operativo, reciben el pitazo sobre la presencia de un informante oculto en sus propias filas, y ello desatará una búsqueda frenética para tratar de ubicarlo y exponerlo. Se trata de un eficaz filme que combina la acción con el suspenso, en el que quizás el único requisito que el espectador debe de cumplir, es conocer un poco de la historia sociopolítica coreana de años recientes. Una prueba más de la buena salud que actualmente tiene el cine proveniente de ese país.
Priscilla (Estados Unidos, 2023) de Sofia Coppola.
El nuevo trabajo de Sofia Coppola está basado en el libro Elvis and Me escrito por Priscilla Presley, en el cual esta última relata su vida romántica y sus vivencias al lado de su famoso esposo. En su película, Coppola ofrece una mirada eminentemente feminista a la relación sostenida entre su protagonista (encarnada aquí por Cailee Spaeny), pero de manera simultánea desacraliza la figura del llamado “rey del rock and roll” (interpretado por Jacob Elordi), yendo a contracorriente de lo narrado por Baz Luhrmann en Elvis, su filme del 2022, concibiendo aquí un relato menos grandilocuente que el de Luhrmann, pero mucho más profundo e inquisitivo.
Tenéis que venir a verla (España, 2022) de Jonás Trueba.
Después de que la peor etapa de la pandemia ha pasado, una pareja invita a otra pareja de amigos a una comida, con el fin de que éstos últimos conozcan su nuevo domicilio. Y mientras comen, beben, juegan y en general pasan un día apacible, charlan tanto de cosas banales, como de temas más complejos, relacionados con la vida y su sentido. Un trabajo austero de Jonás Trueba que pareciese una mera bagatela, pero con una ligereza y lirismo frescos y agradables.
Uma & Haggen: Princesa y vikingo (México, 2023) de Benito Fernández.
El otro de los dos primeros estrenos mexicanos de este año es un filme de animación el cual transcurre en un universo distópico, donde una joven princesa de un pueblo originario y un niño vikingo, tratarán de salvar a su mundo tanto de un cataclismo como de las perversas maquinaciones de un grupo de villanos. Aunque su animación tiene calidad y algunos de sus personajes son visualmente atractivos, su lado flojo reside en el un tanto escaso desarrollo de personajes, en una trama elemental y algo incoherente, y en general, a un desarrollo argumental y dramático no del todo logrado, por lo que resulta un producto sólo ideal para niños muy pequeños.
