Estamos en época navideña y, con ella, un montón de películas y series donde todo trata de amor, amistad, unidad y reconciliación. Pero, bueno, si no trata de eso, entonces no tendría el espíritu de las fechas decembrinas, ¿no?

Una de las series más destacadas está siendo Tormenta de Navidad, que se encuentra en el top 10 de lo más visto de la plataforma de streaming Netflix. Se trata de una miniserie noruega, de seis episodios, con duración de 35 minutos cada uno, que ha cautivado a la audiencia.

Esta serie de corta duración nos trae todo eso, todo el bulto de emociones propios del fin de año, pero también nos hace recordar que no debemos dar todo por sentado. Ese amor de pareja, amistad y, sobre todo, siempre recordar quién eres y lo que en realidad vales.

Trata sobre un grupo de personas que llegan al aeropuerto de Oslo, algunas para dar la bienvenida a sus seres queridos, otras para volar a casa con sus familias y unas más que quieren irse lejos y escapar de la Navidad. Lo cierto es que esta historia se presenta realista y con una gran cuota de emotividad.

En una de las tramas, vemos a una pequeña que solo quiere que sus papás dejen de pelear. Por otro lado, vemos un Santa que, de alguna manera, no es la viva representación de éste, ni física ni del carisma del personaje que todos conocemos.

Un par de artistas que buscan la conexión de su vida personal con su vida de artistas. Una mujer joven anhelando el amor aun cuando piensa que lo tiene. Una joven que sueña con Paris, con el amor y con el estereotipo de bailar bajo la Torre Eiffel. Por último, un piloto realista y “aguafiestas” que solo quiere que la tormenta concluya para poder seguir su camino.

Dentro de los personajes  destacan un bartender que escucha y anima a los pasajeros a que disfruten el contratiempo. Una mujer poderosa y rica que exige todo el tiempo que se haga lo que quiere y una chica con sueños frustrados que no es escuchada por los que cree que son sus amigos.

Lo más interesante es ver cada desenlace de la historia de las personas atrapadas en el aeropuerto por una terrible tormenta invernal, de cómo uno a uno se van topando con conflictos, con reencontrarse a sí mismos. Hay mucha reflexión y aprendizajes, vivir la vida al máximo aún estando en un solo lugar que para muchos es aburrido y abrumador y para otros es una experiencia fantástica, de esas que a veces suceden por algo que ellos llaman destino.

Esta serie, con la cual es fácil engancharte, es lo que muchos nos hacen falta ver para ablandar nuestro corazón y agradecer a la gente que nos rodea y lo que tenemos en la vida, fecha ideal para abrazar a esa persona que siempre está a tu lado o a esa que por alguna razón nunca lo estuvo pero que en el fondo sabes que le hacías falta.

Le doy 3 Thalíestrellas. Es una serie familiar para compartir en el calor del hogar.