Al morir la matinée, terror al estilo giallo
POR: ISRAEL YERENA
23-11-2020 21:57:45
El cine, sobre todo el de terror, es una experiencia maravillosa e inigualable cuando se acude a una función para mirar cómo un asesino masacra a un grupo de jóvenes. Sin embargo, la diversión no es tanta cuando el psicópata se encuentra en la misma sala que nosotros, acechando en la oscuridad para matarnos de la manera más cruel, tal como Al morir la matinée lo expone.
Una adolescente reemplaza a su padre como proyeccionista en la última función de un enorme cine. Lo que para ella iba a ser una aburrida noche cambiando los rollos de las películas, se convierte en un infierno cuando un hombre comienza a asesinar a los espectadores en la sala.
Al morir la matinée, del director Maximiliano Contenti, es una propuesta interesante pero con algunos altibajos, mismos que por fortuna no son tantos y permiten disfrutar su trama si lo que se busca es mirar algo de violencia.
Lo anterior es el primero de sus dos puntos fuertes, ya que a lo largo de toda la cinta se presentan diversos asesinatos ingeniosos, repletos de sangre y que evocan al cine clásico de terror de los años 70 y 80. Esto se agradece todavía más si se toma en cuenta que las masacres utilizan efectos prácticos y ni una sola pizca de CGI.
Pero no sólo eso, pues su segunda y quizá mayor fortaleza es que gracias a su ritmo, sus actuaciones y su paleta de colores, totalmente saturada de una iluminación verde, roja, azul y amarilla, esta cinta evoca al giallo, género exclusivamente italiano que tan popular se hizo gracias a cintas como Suspiria, Opera, El pájaro de las plumas de cristal o Seis mujeres para el asesino, entre otras.
Paradójicamente, también son sus actuaciones y su ritmo lo que la hacen flaquear, pues si bien el giallo cuenta con personajes actuando de forma exagerada, en esta cinta, más que hacer esto, pareciera que los protagonistas apenas intentan actuar. Gracias a ello la atención se pierde por momentos, provocando que lo verdaderamente interesante sea mirar qué tan explícita será la próxima matanza.
En resumen, Al morir la matinée es un filme meramente entretenido si se le mira como un homenaje al giallo a pesar de las pequeñas fallas en su trama.
El cine, sobre todo el de terror, es una experiencia maravillosa e inigualable cuando se acude a una función para mirar cómo un asesino masacra a un grupo de jóvenes. Sin embargo, la diversión no es tanta cuando el psicópata se encuentra en la misma sala que nosotros, acechando en la oscuridad para matarnos de la manera más cruel, tal como Al morir la matinée lo expone.
Una adolescente reemplaza a su padre como proyeccionista en la última función de un enorme cine. Lo que para ella iba a ser una aburrida noche cambiando los rollos de las películas, se convierte en un infierno cuando un hombre comienza a asesinar a los espectadores en la sala.
Al morir la matinée, del director Maximiliano Contenti, es una propuesta interesante pero con algunos altibajos, mismos que por fortuna no son tantos y permiten disfrutar su trama si lo que se busca es mirar algo de violencia.
Lo anterior es el primero de sus dos puntos fuertes, ya que a lo largo de toda la cinta se presentan diversos asesinatos ingeniosos, repletos de sangre y que evocan al cine clásico de terror de los años 70 y 80. Esto se agradece todavía más si se toma en cuenta que las masacres utilizan efectos prácticos y ni una sola pizca de CGI.
Pero no sólo eso, pues su segunda y quizá mayor fortaleza es que gracias a su ritmo, sus actuaciones y su paleta de colores, totalmente saturada de una iluminación verde, roja, azul y amarilla, esta cinta evoca al giallo, género exclusivamente italiano que tan popular se hizo gracias a cintas como Suspiria, Opera, El pájaro de las plumas de cristal o Seis mujeres para el asesino, entre otras.
Paradójicamente, también son sus actuaciones y su ritmo lo que la hacen flaquear, pues si bien el giallo cuenta con personajes actuando de forma exagerada, en esta cinta, más que hacer esto, pareciera que los protagonistas apenas intentan actuar. Gracias a ello la atención se pierde por momentos, provocando que lo verdaderamente interesante sea mirar qué tan explícita será la próxima matanza.
En resumen, Al morir la matinée es un filme meramente entretenido si se le mira como un homenaje al giallo a pesar de las pequeñas fallas en su trama.