Hoy despedimos a un gran músico, siempre alegre, siempre invitando a la gente a bailar a ritmo de vallenato, convocando a cientos o miles de personas en festivales y conciertos, querido por muchos intérpretes con quién compartió el escenario, Celso Piña, el "rebelde del acordeón", nos dejó este miércoles a causa de un paro cardíaco.

Recuerdo la ocasión que tuve oportunidad de entrevistarlo en las oficinas de una disquera ubicada en la zona de Polanco, era 2014 y en aquella ocasión Celso promocionaba su disco “Aquí presente compa”, el cual incluía un tema dedicado a Gabriel García Márquez y uno más a Rigo Tovar.

Había muchos periodistas esperando turno para la entrevista, yo fui de las últimas a las que atendió, pero eso no mermó su  disposición, me recibió sonriente, su alegría y gentileza eran parte de su personalidad, siempre atento, siempre amable y risueño.

Emocionado me contó todos los detalles de su disco, sus planes para promocionarlo y como había sido el proceso para componer y grabar cada tema, pero dónde más emoción puso fue cuando me compartió su relación con el escritor colombiano García Márquez, a quien recordaba con gran admiración.

"Gabo vio en mí a un amigo y un exponente de su folclor, yo siempre lo admiré como escritor, la primera vez que estuvimos juntos, yo le canté mis canciones con el acordeón mientras él las bailaba”, me contó aquella vez.

También me dijo que la siguiente vez que estuvieron juntos, él llevaba consigo la primera edición de “Cien años de soledad” y le pidió se lo firmara, “mientras me preguntaba cómo estaba escribía una dedicatoria que decía: para Celso Piña de su hincha… El Gabo”, recordó el músico quién dedicó el tema "Reina de cumbias" al Premio Nobel de Literatura.

Además del gusto por la música y el baile, a Celso y García Marquéz los unía también el cine, mientras Gabo escribió el guion de películas como El Gallo de Oro, donde hizo mancuerna con Roberto Gabaldón y Carlos Fuentes, Celso participó en el soundtrack de las cintas Babel, dirigida por Alejandro G. Iñárritu; Zapata, el sueño del hombre, dirigida por Alfonso Arau, y Te Counseñor, dirigida por Ridley Scott.

La vida y trayectoria de Celso Piña fue llevada a la pantalla grande a través del documental Celso Piña, el rebelde del acordeón (2014) dirigido por Alfredo Marrón, que se proyectó en diversos festivales de cine y también en el festejo por los 55 años del programa Canal Once al aire, que culminó con un concierto gratuito en el Auditorio Nacional.

El documental tuvo un recorrido exitoso por diversos festivales de cine como el de Monterrey, donde obtuvo el reconocimiento al mejor largometraje documental mexicano en 2013.

La cinta Incluye la investigación que se hizo sobre la cumbia colombiana y la llegada del acordeón a Monterrey. Además tiene la calidez del propio Celso Piña y su Ronda Bogotá a través de las diversas entrevistas que forman parte del filme.

“Quisimos contar la historia ruda del barrio bravo pero la gente también quiere divertirse y tuvimos claro que teníamos que poner una dosis suficiente de humor y baile para que la gente lo pasara bien”, comentó Alfonso Hurtado, productor del documental en una entrevista concedida a Imcine.

El amor por la cumbia colombiana, sus experiencias en el barrio bravo de Tepito, su familia, sus caídas, sus éxitos y el cariño de otros cantantes y de su público, son, entre otros, los temas que componen el documental.

Hoy, con ese mismo cariño recordemos a Celso Piña, el rey del acordeón, como a él seguramente le gustaría, escuchando y bailando sus canciones, porque como él mismo lo dijo: "No hay quien se resista a la cumbia".