Producir cine es saber tejer talentos: Bertha Navarro
POR: NANCY MORA EN GUADALAJARA
04-07-2022 00:55:31
Bertha Navarro tiene 50 años de experiencia como productora de cine y en este largo y no siempre fácil camino ha aprendido que lo más importante en el terreno de la producción es tener la capacidad y sensibilidad para elegir buenos proyectos, pero también la habilidad para ir tejiendo talentos.
“Como productora, en primer lugar me tiene que fascinar el proyecto, porque si no no hay manera… yo soy una productora cineasta, vengo de ahí, de hacer cine y bueno evidentemente como productora tengo que buscar fondos, ver la manera de que salgan adelante, pero le doy mucho peso a la calidad cinematográfica, que verdaderamente me guste el proyecto y lo sienta, luego está la parte colaborativa, hacer cine es un acto de colaboración y mi papel es ir tejiendo los talentos y esa es la parte que como productora más me gusta y si hablamos de lo que menos me gusta hacer es conseguir la lana”, expresó Bertha en entrevista con Encuadres.
Navarro, quien inició su carrera como productora en 1973 con la película Reed, México Insurgente (1973), una de las primeras producciones independientes en México, la cual fue reconocida en diversos festivales alrededor del mundo, destacó la importancia de hermandad en el quehacer cinematográfico, “yo quisiera que pudiéramos tener esa actitud colaborativa hacia nuestras cinematografías y en general con otros productores”.
Como ejemplo mencionó a Jaime Baksht, ganador del Oscar a Mejor Sonido por su trabajo en Sound of Metal, en la que trabajó al lado de Nicolás Becker, Carlos Cortés, Michelle Couttolenc y Phillip Bladh, y que colaboró en la cinta Sin muertos no hay carnaval de Sebastián Cordero, con quién Navarro volvió a hacer mancuerna ahora en la coproducción de la película Tiempos Futuros, “concretamente en esta película yo creo que también la colaboración de Jaime fue muy importante, que va más allá de hicimos la postproducción sonora”.
La productora de películas como Cabeza de vaca, El laberinto del fauno y Ayotzinapa el paso de la tortuga, compartió que ha realizado muchas coproducciones con América Latina “porque creo que tenemos que vernos, hermanarnos y ayudarnos, además porque nosotros tenemos apoyos más allá de los financieros, tenemos apoyos de gente de cine que puede colaborar con otras películas”.
Respecto al cine mexicano consideró que también necesita de mucha ayuda “tenemos una cinematografía ya de mucho tiempo, por ejemplo Eugenio Caballero que ha trabajado tanto con directores reconocidos como con los que empiezan su carrera, hay muchos talentos que también comparten sus conocimientos, entonces más allá de lo financiero también está el apoyo creativo y eso es lo que yo me enfoco”.
Por lo anterior, Navarro invitó a quienes se dedican a la realización de cine en todas sus áreas a abonar el terreno de la colaboración, hacer comunidad, familia y dejar atrás el egoísmo en pos de un espíritu de colaboración.
“Ese es el tema más importante, unirse como talentos, reconocerse, valuarse y no al revés, el egoísmo lo único que hace es estrechar el camino e irte por el mal camino y normalmente haces una mala película porque lo más fascinante del cine es justamente la colaboración, reunir los talentos, que trabajemos juntos y yo creo que con esa experiencia sí salen las buenas películas porque yo lo he vivido y he podido apoyar a jóvenes talentos que después crecen muchísimo”.
Bertita, como le llaman en el medio, recordó cómo en una de sus visitas a Guadalajara conoció a Guillermo Del Toro, “era un chamaquito que ya había hecho algo pero no era conocido como ahora, así que es un ejemplo de que debemos abrirnos a cierta generosidad, a escuchar, a ver, a saber leer, creo que yo se leer guiones muy bien, llevo muchos años haciéndolo y por eso tengo más de 30 años realizando talleres de guiones, de actuación, de música en el cine, es una manera también de buscar el talento”.
Por todo lo anterior Bertha Navarro está convencida de que realizar cine es como hacer un tejido, “una buena película debe tener la música adecuada o la sonoridad adecuada, hay que conocer también el trabajo de un compositor y cómo hablarle y él como ve una película entonces, lo mismo pasa en cada área, son tejidos, experiencias colectivas, por lo que aquí el egoísmo y la vanidad lo único que hacen es llevarte al fracaso”.
Bertha Navarro tiene 50 años de experiencia como productora de cine y en este largo y no siempre fácil camino ha aprendido que lo más importante en el terreno de la producción es tener la capacidad y sensibilidad para elegir buenos proyectos, pero también la habilidad para ir tejiendo talentos.
“Como productora, en primer lugar me tiene que fascinar el proyecto, porque si no no hay manera… yo soy una productora cineasta, vengo de ahí, de hacer cine y bueno evidentemente como productora tengo que buscar fondos, ver la manera de que salgan adelante, pero le doy mucho peso a la calidad cinematográfica, que verdaderamente me guste el proyecto y lo sienta, luego está la parte colaborativa, hacer cine es un acto de colaboración y mi papel es ir tejiendo los talentos y esa es la parte que como productora más me gusta y si hablamos de lo que menos me gusta hacer es conseguir la lana”, expresó Bertha en entrevista con Encuadres.
Navarro, quien inició su carrera como productora en 1973 con la película Reed, México Insurgente (1973), una de las primeras producciones independientes en México, la cual fue reconocida en diversos festivales alrededor del mundo, destacó la importancia de hermandad en el quehacer cinematográfico, “yo quisiera que pudiéramos tener esa actitud colaborativa hacia nuestras cinematografías y en general con otros productores”.
Como ejemplo mencionó a Jaime Baksht, ganador del Oscar a Mejor Sonido por su trabajo en Sound of Metal, en la que trabajó al lado de Nicolás Becker, Carlos Cortés, Michelle Couttolenc y Phillip Bladh, y que colaboró en la cinta Sin muertos no hay carnaval de Sebastián Cordero, con quién Navarro volvió a hacer mancuerna ahora en la coproducción de la película Tiempos Futuros, “concretamente en esta película yo creo que también la colaboración de Jaime fue muy importante, que va más allá de hicimos la postproducción sonora”.
La productora de películas como Cabeza de vaca, El laberinto del fauno y Ayotzinapa el paso de la tortuga, compartió que ha realizado muchas coproducciones con América Latina “porque creo que tenemos que vernos, hermanarnos y ayudarnos, además porque nosotros tenemos apoyos más allá de los financieros, tenemos apoyos de gente de cine que puede colaborar con otras películas”.
Respecto al cine mexicano consideró que también necesita de mucha ayuda “tenemos una cinematografía ya de mucho tiempo, por ejemplo Eugenio Caballero que ha trabajado tanto con directores reconocidos como con los que empiezan su carrera, hay muchos talentos que también comparten sus conocimientos, entonces más allá de lo financiero también está el apoyo creativo y eso es lo que yo me enfoco”.
Por lo anterior, Navarro invitó a quienes se dedican a la realización de cine en todas sus áreas a abonar el terreno de la colaboración, hacer comunidad, familia y dejar atrás el egoísmo en pos de un espíritu de colaboración.
“Ese es el tema más importante, unirse como talentos, reconocerse, valuarse y no al revés, el egoísmo lo único que hace es estrechar el camino e irte por el mal camino y normalmente haces una mala película porque lo más fascinante del cine es justamente la colaboración, reunir los talentos, que trabajemos juntos y yo creo que con esa experiencia sí salen las buenas películas porque yo lo he vivido y he podido apoyar a jóvenes talentos que después crecen muchísimo”.
Bertita, como le llaman en el medio, recordó cómo en una de sus visitas a Guadalajara conoció a Guillermo Del Toro, “era un chamaquito que ya había hecho algo pero no era conocido como ahora, así que es un ejemplo de que debemos abrirnos a cierta generosidad, a escuchar, a ver, a saber leer, creo que yo se leer guiones muy bien, llevo muchos años haciéndolo y por eso tengo más de 30 años realizando talleres de guiones, de actuación, de música en el cine, es una manera también de buscar el talento”.
Por todo lo anterior Bertha Navarro está convencida de que realizar cine es como hacer un tejido, “una buena película debe tener la música adecuada o la sonoridad adecuada, hay que conocer también el trabajo de un compositor y cómo hablarle y él como ve una película entonces, lo mismo pasa en cada área, son tejidos, experiencias colectivas, por lo que aquí el egoísmo y la vanidad lo único que hacen es llevarte al fracaso”.