¿Miradas femeninas o cuotas de género?
POR: NANCY MORA EN GUADALAJARA
14-06-2022 14:36:45
“Las mujeres tenemos que dejar de quejarnos y hacer las cosas”, “las cuotas de género son muletas para el arte”, “la respuesta está en la formación de las nuevas generaciones”, fueron algunas de las sentencias de productoras y directoras que participaron en la mesa "La mirada femenina: nuevas narrativas audiovisuales con perspectiva de género”.
La segunda mesa del foro Mujeres en el cine y la industria audiovisual, organizado por la AMACC en el marco del Festival Internacional de Cine en Guadalajara, se centró en temas como la cuota de género y la lucha histórica de las mujeres por tener un lugar en la industria audiovisual, algo que si bien es importante, distó del tema central.
Lo anterior obedeció a que en la charla estaba inicialmente contemplada la participación de las guionistas María René Prudencio, Sofía Gómez-Córdova, Astrid Rondero, María Sojob y Fernanda Valadéz pero finalmente asistieron la productora uruguaya Agustina Chirino, la productora mexicana Sandra Solares y la directora panameña Ana Endara.
La productora uruguaya Agustina Chiarino fue contundente en sus comentarios: “Yo produzco peliculas sin importar si están dirigidas por hombres o mujeres, si es importante quién está a la cabeza del proyecto, pero yo apuesto por las historias…. Para mi las cuotas de género son muletas que te sirven para avanzar” y finalmente concluyó que “las mujeres tenemos que dejar de quejarnos y hacer las cosas”.
En esta segunda mesa de diálogo Agustina explicó que “En Uruguay he notado que en los últimos años hay un incremrnto considerable en los proyectos liderados por mujeres, hay muchas productoras, aunque es un proceso que se está dando, es un espacio que se empieza a abrir para las mujeres, aunque a veces hay que forzar que eso suceda”.
“Tenemos la costumbre de quejarnos todo el tiempo, creo que las mujeres que quieran tienen que luchar por tener un lugar en la industria… creo que las nuevas generaciones están muy enfocada en una lucha que no sé cual es, una lucha teórica y conceptual muy alejada del hacer, a mí personalmente lo importante es hacer las cosas” agregó Agustina, quien está consciente de que El cine es un arte muy privilegiado, “todos somos de clase media alta y pareciera a veces eso se nos olvida”.
En su oportunidad, Sandra Solares, quien tiene más de 20 años como productora en México, compartió con los asistentes que ella nunca he tenido un problema para ser parte de la industria siendo mujer “aunque yo sentía que no podía dar saltos, siempre me impulsaron, en lugar de luchar me echaba hacia atrás y tarde muchos años en darme cuenta del valor de mi trabajo”.
“Históricamente en el cine las mujeres han sido retratadas con personas frágiles, es un estereotipo, pero con el tiempo hemos cambiado la visión, ahora vemos a la mujer en otra postura y creo que la lucha de la mujer ha sido extenuante por conseguir lugares en la industria, todo el tema laboral, pero creo que llaga un momentl en la vida de cualquier minoría de tomar ese lugar, buscar los proyectos, yo sé que la lucha sigue pero debe haber un momento en que se deje de pensar solo en la sororifad y luchar por tu propio lugar”.
Finalmente, Sandra señaló que las cuotas funcionanan porque incentivan, “que te impogan que sea directora y te des cuenta que todas están ocupadas, eso me hace buscarlas y no quedarme solo con lo que conozco”.
En tanto, la directora Ana Endara compartió que en su país -Panamá- no existen las cuotas de género, “en Panamá no hay mujeres editoras, camarógrafas o sonidistas, es lamentable, yo sí creo en la importancia de la diversidad de quienes hacen cine, quienes están atrás de las cámaras y con ello garantizar diferentes miradas en el cine”.
Por lo anterior, Ana concluyó que la respuesta está en las escuelas, en la formación de las nuevas generaciones, “hay cosas que te marcan y es sumamente importante tener referentes femeninos en el cine”.
Así fue la segunda charla del Foro Miradas Femeninas, donde se dejó prácticamente de lado el tema central que eran las nuevas narrativas audiovisuales con perspectiva de género y se limitó hablar de las cuotas y de la lucha de las mujeres en una industria históricamente acaparada por hombres.
“Las mujeres tenemos que dejar de quejarnos y hacer las cosas”, “las cuotas de género son muletas para el arte”, “la respuesta está en la formación de las nuevas generaciones”, fueron algunas de las sentencias de productoras y directoras que participaron en la mesa "La mirada femenina: nuevas narrativas audiovisuales con perspectiva de género”.
La segunda mesa del foro Mujeres en el cine y la industria audiovisual, organizado por la AMACC en el marco del Festival Internacional de Cine en Guadalajara, se centró en temas como la cuota de género y la lucha histórica de las mujeres por tener un lugar en la industria audiovisual, algo que si bien es importante, distó del tema central.
Lo anterior obedeció a que en la charla estaba inicialmente contemplada la participación de las guionistas María René Prudencio, Sofía Gómez-Córdova, Astrid Rondero, María Sojob y Fernanda Valadéz pero finalmente asistieron la productora uruguaya Agustina Chirino, la productora mexicana Sandra Solares y la directora panameña Ana Endara.
La productora uruguaya Agustina Chiarino fue contundente en sus comentarios: “Yo produzco peliculas sin importar si están dirigidas por hombres o mujeres, si es importante quién está a la cabeza del proyecto, pero yo apuesto por las historias…. Para mi las cuotas de género son muletas que te sirven para avanzar” y finalmente concluyó que “las mujeres tenemos que dejar de quejarnos y hacer las cosas”.
En esta segunda mesa de diálogo Agustina explicó que “En Uruguay he notado que en los últimos años hay un incremrnto considerable en los proyectos liderados por mujeres, hay muchas productoras, aunque es un proceso que se está dando, es un espacio que se empieza a abrir para las mujeres, aunque a veces hay que forzar que eso suceda”.
“Tenemos la costumbre de quejarnos todo el tiempo, creo que las mujeres que quieran tienen que luchar por tener un lugar en la industria… creo que las nuevas generaciones están muy enfocada en una lucha que no sé cual es, una lucha teórica y conceptual muy alejada del hacer, a mí personalmente lo importante es hacer las cosas” agregó Agustina, quien está consciente de que El cine es un arte muy privilegiado, “todos somos de clase media alta y pareciera a veces eso se nos olvida”.
En su oportunidad, Sandra Solares, quien tiene más de 20 años como productora en México, compartió con los asistentes que ella nunca he tenido un problema para ser parte de la industria siendo mujer “aunque yo sentía que no podía dar saltos, siempre me impulsaron, en lugar de luchar me echaba hacia atrás y tarde muchos años en darme cuenta del valor de mi trabajo”.
“Históricamente en el cine las mujeres han sido retratadas con personas frágiles, es un estereotipo, pero con el tiempo hemos cambiado la visión, ahora vemos a la mujer en otra postura y creo que la lucha de la mujer ha sido extenuante por conseguir lugares en la industria, todo el tema laboral, pero creo que llaga un momentl en la vida de cualquier minoría de tomar ese lugar, buscar los proyectos, yo sé que la lucha sigue pero debe haber un momento en que se deje de pensar solo en la sororifad y luchar por tu propio lugar”.
Finalmente, Sandra señaló que las cuotas funcionanan porque incentivan, “que te impogan que sea directora y te des cuenta que todas están ocupadas, eso me hace buscarlas y no quedarme solo con lo que conozco”.
En tanto, la directora Ana Endara compartió que en su país -Panamá- no existen las cuotas de género, “en Panamá no hay mujeres editoras, camarógrafas o sonidistas, es lamentable, yo sí creo en la importancia de la diversidad de quienes hacen cine, quienes están atrás de las cámaras y con ello garantizar diferentes miradas en el cine”.
Por lo anterior, Ana concluyó que la respuesta está en las escuelas, en la formación de las nuevas generaciones, “hay cosas que te marcan y es sumamente importante tener referentes femeninos en el cine”.
Así fue la segunda charla del Foro Miradas Femeninas, donde se dejó prácticamente de lado el tema central que eran las nuevas narrativas audiovisuales con perspectiva de género y se limitó hablar de las cuotas y de la lucha de las mujeres en una industria históricamente acaparada por hombres.