Adiós Ennio Morricone, El Maestro que musicalizó al cine
POR: NANCY MORA
06-07-2020 03:57:23
“No sé cómo será el más allá. Esperemos que esté bien”, expresó Ennio Morricone hace poco más de un año; hoy el célebre compositor de música, para más de 500 películas, murió a los 91 años de edad en su ciudad natal Roma, luego de permanecer hospitalizado algunos días a causa de una caída.
La lamentable noticia fue confirmada por su familia en una nota en la que señalan que el maestro "ha conservado hasta el final lucidez y gran dignidad" y que estuvo acompañado hasta el último momento por su amada esposa María.
“Recordaremos siempre, con infinita gratitud, el genio artístico del maestro Morricone. Nos hizo soñar, emocionar, reflexionar, escribiendo notas memorables que permanecerán indelebles en la historia de la música y del cine", escribió el primer ministro, Giuseppe Conte, en sus redes sociales.
Mientras que el ministro de Cultura, Dario Franceschini, aseguró que Morricone “Nos deja un músico de refinada competencia que con sus melodías hizo emocionar y soñar a todo el mundo, que le otorgó los mayores y más importantes premios y reconocimientos, como el Oscar".
El pasado 5 de junio, Morricone fue galardonado con el Premio Príncipe de Asturias de las Artes, junto con el compositor John Williams (Nueva York). “Hoy es un día para reflexionar y pensar en el camino recorrido, sentir con humildad y gratitud que, quizá durante mi trabajo, he sido capaz de llegar a las personas y compartir con ellas la experiencia única que es la música. Esto es lo que significa para mí el Premio Princesa de Asturias de las Artes”, señaló el maestro tras recibir el reconocimiento.
Para “El Maestro” -como le gustaba que lo llamaran- la música era su vida, le dedicó su tiempo, su pasión y su talento, “Cada vez que compongo siento una gran responsabilidad, porque quiero probar algo completamente original y que a la vez sea entendido. Esa es mi firma, mi meta, mi principal deseo”, explicó en una entrevista concedida al diario El País.
Musicalizó más de 500 películas, entre ellas, Por un puñado de dólares, Cinema Paradiso, La misión, Novecento, El bueno, el feo y el malo o Los intocables de Eliot Ness, que no serían las mismas sin el talento que imprimió Morricone a través de su música. “He sufrido mucho cuando he hecho cine, porque tenía que escribir música que estuviera bien para mí y para el filme, el público, el director o el productor. Es un ejercicio de una dificultad tremenda, mis obras tenían que mantener la dignidad”, explicaba
El año pasado el compositor publicó su autobiografía titulada In My Own Words; realizó su gira de despedida The Final Concerts World Tour, con la que celebraba más de 60 años de trayectoria y con la que recorrió diversas ciudades de Europa deleitando a cientos de miles.
El director Giuseppe Tornatore le rendió homenaje a través del documental The Glance of Music.
UNA VIDA DE AMOR POR LA MUSICA
Ennio Morricone nació en Roma el 10 de noviembre de 1928 y siguió los pasos de su padre, estudió en el Conservatorio Santa Cecilia bajo la dirección de Goffredo Alessandrini y se diplomó en composición, trompeta y canto coral, también estudió dirección de orquesta, y aunque en los años 60 fue parte del pop italiano, lo suyo siempre fue la música sinfónica.
Comenzó como compositor de música sinfónica y de cámara, extendió su actividad a la música ligera y trabajó además de arreglista de cantantes como Gianni Morandi o Jimmy Fontana.
Su primera incursión en el mundo del cine se produjo en 1961 con la creación de la banda de la película El federal, de Luciano Salcio y mantuvo una estrecha colaboración con otros cineastas como Marco Bellocchio o Bernardo Bertolucci. Sin embargo su gran éxito llegó con el padre del 'speghetti western': Sergio Leone en películas como Por un puñado de dólares (1964), El bueno, el feo y el malo (1966), Hasta que llegó su hora (1968) o ¡Agáchate, maldito! (1971).
Consagrado como uno de los más prestigiosos compositores de la historia del cine, Morricone trabajó con otros directores como Pier Paolo Pasolini, Lina Wertmuller, Roman Polanski, Oliver Stone o los españoles Luis Buñuel en Leonor (1975) o Pedro Almodóvar en Átame (1990).
Algunas de sus aportaciones más célebres son las composiciones para la cinta Cinema Paradiso (1988), de Giuseppe Tornatore; la obra maestra de Bernardo Bertolucci, Novecento (1976), o la historia de aquel misionero jesuita de La misión (1986).
Ennio Morricone también mantuvo una estrecha colaboración con Pasolini componiendo la banda sonora de muchas de sus películas hasta la muerte del realizador. Entre sus creaciones más recordadas para el director italiano figura la sorprendente y divertida obertura musical para los titulos de crédito de la pelicula Uccellacci e uccellini (Pajaritos y pajarracos) con la participación vocal del cantante Domenico Modugno.
La banda sonora de La Misión, le dió a Morricone su estatus de estrella en la industria del Hollywood, al recibir la nominación para los Oscars de 1987, sin embargo perdería ante la estatuilla ante la banda sonora de la pelicula Round Midnight creada por Herbie Hancock ante la sorpresa de muchos y la descalificación por parte del propio músico acusando de robo el veredicto.
Tras varios años y una prolifica trayectoria, finalmente en 2007 le otorgaron un Oscar Honorario y en 2016 obtuvo el Oscar por Mejor banda sonora para el western Los ocho más odiados, de Quentin Tarantino, una composición que le valdría otros reconocimientos como un Globo de Oro y el Bafta. Cabe señalar que Tarantino reutilizó algunas de sus melodías en películas como Kill Bill (2003), Bastardos sin gloria (2009) o Django desencadenado (2012) con aquel lírico Ancora qui.
Cuando Ennio Morricone recibió el Oscar subió al escenario ovacionado, recogió la estatuilla y dio las gracias a su mujer, Maria, por soportar su “ausencia”. El maestro creía que le falta al menos un galardón, por La misión. La leyenda cuenta que tal vez pudo haber otra estatuilla pero al parecer la candidatura de Érase una vez en... Hollywood fue entregada fuera de plazo. Algunos creen que Hollywood lo ninguneó porque Morricone nunca se mudó a Los Ángeles. Y eso que un estudio le ofreció una villa y un productor quiso asumir los gastos para que se quedara allí escribiendo, pero el corazón puede más “Amo Roma, la Roma, me gusta estar aquí”, declaró el Maestro.
Con más de 60 años de trayectoria, Morricone se consagró como uno de los compositores más versátiles de la historia del cine y también de los más influyentes del siglo XX, cuyo talento cambiaría para siempre la historia de la música en el cine.
“Sinceramente, creo que a veces perdemos de vista lo esencial. Me preguntan por el valor de la música en una película y sólo puedo decir que mi trabajo es válido siempre que ayude a la propia película. Le diré una cosa: una película mala lo será independientemente de la banda sonora. Pero una música inspirada nunca podrá hacer buena a una película", señaló Morricone en una de las últimas entrevistas que concedió a elmundo.es.
“No sé cómo será el más allá. Esperemos que esté bien”, expresó Ennio Morricone hace poco más de un año; hoy el célebre compositor de música, para más de 500 películas, murió a los 91 años de edad en su ciudad natal Roma, luego de permanecer hospitalizado algunos días a causa de una caída.
La lamentable noticia fue confirmada por su familia en una nota en la que señalan que el maestro "ha conservado hasta el final lucidez y gran dignidad" y que estuvo acompañado hasta el último momento por su amada esposa María.
“Recordaremos siempre, con infinita gratitud, el genio artístico del maestro Morricone. Nos hizo soñar, emocionar, reflexionar, escribiendo notas memorables que permanecerán indelebles en la historia de la música y del cine", escribió el primer ministro, Giuseppe Conte, en sus redes sociales.
Mientras que el ministro de Cultura, Dario Franceschini, aseguró que Morricone “Nos deja un músico de refinada competencia que con sus melodías hizo emocionar y soñar a todo el mundo, que le otorgó los mayores y más importantes premios y reconocimientos, como el Oscar".
El pasado 5 de junio, Morricone fue galardonado con el Premio Príncipe de Asturias de las Artes, junto con el compositor John Williams (Nueva York). “Hoy es un día para reflexionar y pensar en el camino recorrido, sentir con humildad y gratitud que, quizá durante mi trabajo, he sido capaz de llegar a las personas y compartir con ellas la experiencia única que es la música. Esto es lo que significa para mí el Premio Princesa de Asturias de las Artes”, señaló el maestro tras recibir el reconocimiento.
Para “El Maestro” -como le gustaba que lo llamaran- la música era su vida, le dedicó su tiempo, su pasión y su talento, “Cada vez que compongo siento una gran responsabilidad, porque quiero probar algo completamente original y que a la vez sea entendido. Esa es mi firma, mi meta, mi principal deseo”, explicó en una entrevista concedida al diario El País.
Musicalizó más de 500 películas, entre ellas, Por un puñado de dólares, Cinema Paradiso, La misión, Novecento, El bueno, el feo y el malo o Los intocables de Eliot Ness, que no serían las mismas sin el talento que imprimió Morricone a través de su música. “He sufrido mucho cuando he hecho cine, porque tenía que escribir música que estuviera bien para mí y para el filme, el público, el director o el productor. Es un ejercicio de una dificultad tremenda, mis obras tenían que mantener la dignidad”, explicaba
El año pasado el compositor publicó su autobiografía titulada In My Own Words; realizó su gira de despedida The Final Concerts World Tour, con la que celebraba más de 60 años de trayectoria y con la que recorrió diversas ciudades de Europa deleitando a cientos de miles.
El director Giuseppe Tornatore le rendió homenaje a través del documental The Glance of Music.
UNA VIDA DE AMOR POR LA MUSICA
Ennio Morricone nació en Roma el 10 de noviembre de 1928 y siguió los pasos de su padre, estudió en el Conservatorio Santa Cecilia bajo la dirección de Goffredo Alessandrini y se diplomó en composición, trompeta y canto coral, también estudió dirección de orquesta, y aunque en los años 60 fue parte del pop italiano, lo suyo siempre fue la música sinfónica.
Comenzó como compositor de música sinfónica y de cámara, extendió su actividad a la música ligera y trabajó además de arreglista de cantantes como Gianni Morandi o Jimmy Fontana.
Su primera incursión en el mundo del cine se produjo en 1961 con la creación de la banda de la película El federal, de Luciano Salcio y mantuvo una estrecha colaboración con otros cineastas como Marco Bellocchio o Bernardo Bertolucci. Sin embargo su gran éxito llegó con el padre del 'speghetti western': Sergio Leone en películas como Por un puñado de dólares (1964), El bueno, el feo y el malo (1966), Hasta que llegó su hora (1968) o ¡Agáchate, maldito! (1971).
Consagrado como uno de los más prestigiosos compositores de la historia del cine, Morricone trabajó con otros directores como Pier Paolo Pasolini, Lina Wertmuller, Roman Polanski, Oliver Stone o los españoles Luis Buñuel en Leonor (1975) o Pedro Almodóvar en Átame (1990).
Algunas de sus aportaciones más célebres son las composiciones para la cinta Cinema Paradiso (1988), de Giuseppe Tornatore; la obra maestra de Bernardo Bertolucci, Novecento (1976), o la historia de aquel misionero jesuita de La misión (1986).
Ennio Morricone también mantuvo una estrecha colaboración con Pasolini componiendo la banda sonora de muchas de sus películas hasta la muerte del realizador. Entre sus creaciones más recordadas para el director italiano figura la sorprendente y divertida obertura musical para los titulos de crédito de la pelicula Uccellacci e uccellini (Pajaritos y pajarracos) con la participación vocal del cantante Domenico Modugno.
La banda sonora de La Misión, le dió a Morricone su estatus de estrella en la industria del Hollywood, al recibir la nominación para los Oscars de 1987, sin embargo perdería ante la estatuilla ante la banda sonora de la pelicula Round Midnight creada por Herbie Hancock ante la sorpresa de muchos y la descalificación por parte del propio músico acusando de robo el veredicto.
Tras varios años y una prolifica trayectoria, finalmente en 2007 le otorgaron un Oscar Honorario y en 2016 obtuvo el Oscar por Mejor banda sonora para el western Los ocho más odiados, de Quentin Tarantino, una composición que le valdría otros reconocimientos como un Globo de Oro y el Bafta. Cabe señalar que Tarantino reutilizó algunas de sus melodías en películas como Kill Bill (2003), Bastardos sin gloria (2009) o Django desencadenado (2012) con aquel lírico Ancora qui.
Cuando Ennio Morricone recibió el Oscar subió al escenario ovacionado, recogió la estatuilla y dio las gracias a su mujer, Maria, por soportar su “ausencia”. El maestro creía que le falta al menos un galardón, por La misión. La leyenda cuenta que tal vez pudo haber otra estatuilla pero al parecer la candidatura de Érase una vez en... Hollywood fue entregada fuera de plazo. Algunos creen que Hollywood lo ninguneó porque Morricone nunca se mudó a Los Ángeles. Y eso que un estudio le ofreció una villa y un productor quiso asumir los gastos para que se quedara allí escribiendo, pero el corazón puede más “Amo Roma, la Roma, me gusta estar aquí”, declaró el Maestro.
Con más de 60 años de trayectoria, Morricone se consagró como uno de los compositores más versátiles de la historia del cine y también de los más influyentes del siglo XX, cuyo talento cambiaría para siempre la historia de la música en el cine.
“Sinceramente, creo que a veces perdemos de vista lo esencial. Me preguntan por el valor de la música en una película y sólo puedo decir que mi trabajo es válido siempre que ayude a la propia película. Le diré una cosa: una película mala lo será independientemente de la banda sonora. Pero una música inspirada nunca podrá hacer buena a una película", señaló Morricone en una de las últimas entrevistas que concedió a elmundo.es.
