“Juguemos como equipo, hagamos un parlamento abierto, les estoy dando mi palabra de que la extinción de Fidecine no va a caminar, vienen retos importantes porque el mundo va a cambiar en muchos sentidos y es un buen momento para cambiar, entiendo que puede haber desconfianza, pero nosotros vamos a cumplir nuestra palabra (…) desde el legislativo no haremos nada para obstruir los acuerdos a los que se han llegado, fortalezcamos la cinematografía, la industria, el arte”, aseguro de manera contundente Mario Delgado, coordinador del Grupo Parlamentario de Morena, bancada que esta semana presentó un decreto para desaparecer diversos fideicomisos, entre ellos el Fondo de Inversión y Estímulos al Cine, FIDECINE.

En una reunión virtual en la que participaron representantes de la comunidad cinematográfica, entre ellos María Novaro, directora del Imcine; Mónica Lozano, presidenta de la Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas (AMACC), Tábata Vilar, directora de Canacine y cineastas como Guillermo del Toro, Alejandro González Iñarritú y Alfonso Cuarón, entre otros, el diputado federal, Mario Delgado, pidió construir una relación de confianza y diálogo.

El cineasta Guillermo del Toro, quien siempre ha mostrado su preocupación e interés en el cine mexicano y ha impulsado el talento nacional, destacó la importancia de la comunicación sobre este tipo de temas, “cuando atañe a un proyecto cultural  en el que todos nosotros hemos estado involucrados de una manera u otra es fundamental la comunicación, nosotros somos gente de cine, lo que queda claro es la importancia que tiene el cine mexicano a nivel mundial, lo que ha costado repuntarlo con los recursos que existen, que ha sido difícil (…) desde que tenía 15 años estoy metido en el cine, desde los 15 años creo en el cine mexicano, las carreras van y vienen, los secuestros van y vienen, pero aquí estamos, por eso es importante demandar claridad y transparencia y que los acuerdos a los que se lleguen se sostengan”.

Otro de los cineastas que participó fue Alfonso Cuarón, quien hizo una aclaración: “el cine sí es cultura pero también es una industria que ha estado en crecimiento constante, de las pocas industrias exitosas en nuestro país, pero no se creó sola, estos estímulos (que se querían extinguir) han sido fundamentales para el desarrollo de una comunidad que ha creado esta industria, que crea empleos y repercute positivamente, creo que estos estímulos son importantes para evitar la fuga de talentos, así que quiero creer que habrá sensatez en la toma de decisiones”.

Alejandro González Iñárritu se sumó a esta conversación para señalar que en los últimos 30 años México pasó de producir 7 películas al año a las más de 200 que se realizan actualmente, más del 2000 por ciento más, y es algo que la industria se ha ganado, porque el cine es un embajador, una imagen, una memoria, el recuerdo de quiénes somos,  la documentación de una cultura, el reforzamiento de nuestra identidad,  y aunque yo no dependo de los fondos gubernamentales para hacer cine, he visto cómo esta industria ha crecido en todos los aspectos, artísticos, técnicos y a nivel de industria que se ha ganado peso a peso el apoyo que se le ha dado, así que yo propongo que estos apoyos se refuercen, no pedimos su clemencia, sino que dupliquen estos apoyos porque aquí tienen sus mejores socios a nivel intelectual y comercial”.

Al tomar la palabra María Novaro, directora del IMCINE, recordó la conversación que tuvo el pasado 19 de mayo con la comunidad cinematográfica en la que se llegaron a acuerdos para seguir promoviendo el cine, “vamos a seguir con el plan que trazamos, enriqueciendo los apoyos (…) la industria cinematográfica es pujante, hemos logrado que los accesos a los apoyos sean mucho más incluyentes, se ha producido cine en las comunidades, sin duda, en 2019 se rompieron records en todos los sentidos,  

Mónica Lozano, presidenta de la AMACC, reiteró que el cine es patrimonio de este país, “todos sabemos que el cine es lo que nos da nombre, voz y voto, no lo podemos perder y necesitamos de la comunicación franca, del diálogo con la comunidad para el diseño y fortalecimiento de los mecanismos de apoyo, se ha trabajado 30 años para pasar de 6 películas a las más de 200 que se produjeron en 2019, el cine ha sido detonador de inversión, de empleos directos e indirectos, es lo que nos da libertad de expresión democracia e identidad, ha sido un embajador en todo el mundo, por eso nos parece fundamental que se siga fortaleciendo en conjunto con la comunidad cinematográfica (…) Defendamos nuestro patrimonio, el cine mexicano, garanticemos la diversidad, la pluralidad, el derecho de las audiencias consagrado en la Constitución política”.

Quien ofreció un panorama general del crecimiento de la industria cinematográfica en México fue Tábata Vilar, directora de Canacine, quien expuso que de acuerdo con un estudio realizado en conjunto con la UNAM, en los últimos 10 años el país ha crecido un 2% en promedio, mientras que la industria cinematográfica creció un 8%, así como la generación de empleos, “fortalecer el FIDECINE puede generar un número importante de empleos, una derrama y un crecimiento del país como ha pasado en los últimos 10 años. Insisto en que la propuesta de ley para desaparecer el FIDECINE no solo se baje sino que se suba otra iniciativa para fortalecerlo y se mejore la comunicación para darnos certeza de lo que pasará con este fideicomiso”.

“Nosotros hemos trabajado en la construcción de la democracia en el siglo XXI por eso me preocupó cuando Mario Delgado nos incluyo dentro de los fideicomisos malos, porque si alguien sabe cómo son estos fideicomisos para el cine es la izquierda, por eso ponernos en la categoría con calificativos no comprobados como corrupción, excesos y privilegios es muy preocupante porque tenemos pruebas de que nadie que forme parte de la comunidad cinematográfica ha caído en esos excesos”, sentenció Víctor Ugalde, presidente del Observatorio Público Cinematográfico.

Otras de las participantes en el foro fue Daniela Michel, directora del Festival Internacional de Cine de Morelia, quien aprovechó la oportunidad para destacar que las películas mexicanas, tanto documental como de ficción, también fomentan la transformación de la sociedad mexicana, además solicitó que se continúe apoyando la realización de los festivales de cine en México.

Jorge Sánchez, productor y quien estuvo al frente de IMCINE de 2013 a 2018 tomó la palabra para proponer una reingeniería del cine mexicano porque “el cine no solo se enfoca en la producción, el cine es cuando una película existe frente a un espectador, hay dos temas que deberían abordarse en las cámaras de diputados y senadores: hay que establecer cuotas de exhibición para el cine nacional y hay que democratizar el EFICINE, son 700 millones de pesos al año que solo van a dar a manos de aquellos que tienen relación con las grandes empresas contribuyentes para lograr esos 8, 15 o 20 millones de pesos para cada películas (…) los fideicomisos se nutren de las regalías de las películas que fueron apoyadas (…) somos privilegiados, tenemos una memoria audiovisual maravillosa”.  

Para concluir la charla, Mario Delgado sostuvo: “Aprovechemos esta coyuntura para fortalecer la industria (cinematográfica), yo creo que las industrias culturales en nuestro país están subestimadas y el impacto económico que tienen, es algo que tiene que cambiar (…) les propongo afrontar los nuevos retos, hay que pensar en los efectos que tendrá el COVID19 en esta industria (…) les reitero los tres acuerdos a los que hemos llegado con la comunidad cinematográfica: FIDECINE no desaparece; establecemos parlamento abierto para fortalecer la industria y se mantienen los acuerdos con IMCINE”.