Una de las principales características que, para bien o para mal, nos distingue a los mexicanos es la picardía que tenemos para enfrentar los malos ratos, pero ni hablar querido lector, a la larga uno se acostumbra, mexicanos pobres pero pa’ los frijoles sí sacamos, ¿qué no? En la era actual no hay tragedia que no se convierta en meme ni arranque que no se transforme en Lady o Lord, por eso hay que andarse con cuidado hoy día de no caer en uno de esos videos virales como, por ejemplo, en donde se pelea la morra del bat con la chava de blanco que saco el video en sus redes sociales.

En fin, lo que quiero decir es que nombres como Alfonso Zayas, Rafael Inclán, Tun Tun, Luis de Alba o el Güero Castro pertenecieron a una época que marcó toda una tendencia en el cine nacional, el bien llamado Cine de Ficheras se convirtió literal en una lluvia dorada que le echo más o menos unos 15 años de duración. Los patrocinadores fueron Luis Echeverría y López Portillo, y la intención era regresar a la época de oro del cine mexicano, pero literal, se les salió el pulque de la jarra.

En un inicio se hacía Cine de Ficheras con melodramas y vedettismo, pero con el paso del tiempo se las empezaron a ver duras y se vinieron en lo que ustedes ya conocieron como sexycomedias, películas de Serie B que fueron la decadencia de esta generación porque sólo te escupían textos muy mal elaborados y escenas sin ton ni son.

Nombres hay muchos, pero aún existen leyendas de este cine que andan por ahí dorando la empanada en algunos festivales, tal es el caso de Alfredo “El Pelón” Solares, que me lo encontré en la Alfombra Roja del Festival 24 Risas por Segundo, y quien amablemente se paró un momento para que usted querido lector, se siente comodamente y lea lo que  me platicó sobre el Cine de Ficheras, venga, no se apene, el Cine de Ficheras era pure mexican comedy.

Yo fui uno de los creadores del Cine de Ficheras, para nosotros fueron películas alegres, divertidas. Los que hicimos este tipo de cine nos lo tomamos como parte de la diversión para el cine, al principio nos costó un poco de trabajo, pero al final la gente lo aceptó. Nunca fue la intención hacerlo grosero, mucha gente nos decía que no le veía el morbo, sino que más bien les daba risa ver al Zayas en calzones.

Sobre el rodaje de una película de ficheras o sexycomedia, me dice, ¡Era la locura, mano! La ventaja que tuvimos cuando hacíamos una película, fue que siempre conservamos el buen humor, y nosotros nos divertíamos mucho haciendo este tipo de cine. Como yo era el que los dirigía a todos, mi objetivo principal era hacerles entender que no quería que llegaran a la mera hora a aprenderse al personaje, sino que se aprendieran toda la película, entonces ya llegaban todos con su personaje aprendido y la película. Tenían la libertad de improvisar mucho, de ser espontáneos, todos eran muy talentosos y muy buenos comediantes.

Una vez me dijo Miguel Arana, uno de los fotógrafos más famosos del cine mexicano, que nosotros le cambiamos la forma de filmar, porque en el gremio de cinefotógrafos estaban acostumbrados a rodar escenas intercaladas, y con nosotros nos íbamos toma 1, toma 2, toma 3… etc, ¿por qué? Porque en la comedia no se puede estar repitiendo una escena ya que pierde su gracia.

¿Cómo era el rodaje con las vedettes?

Todas las compañeras que hicieron las películas con nosotros Sasha, Maribel, Lyn May, Isela Vega, todas cuando se les preguntaba decían que la gente que más las ha respetado en el cine son los comediantes, éramos muy respetuosos y nunca nadie les faltó al respeto, hacíamos las escenas que nos tocaban hacer, pero las cuidábamos siempre.

¿Y con los comediantes, se llevaban pesado en el set?

Tuve la fortuna de dirigirlos a todos, como director yo tenía que acostumbrarme y acostumbrarlos a cómo era la comedia en ese entonces. Logramos juntarnos y omitir el famoso estrellismo, para nosotros ninguno era estrella ni la figura principal, todos éramos iguales y la verdadera estrella de todo era la película en sí. Claro, sí nos llevamos muy fuerte en el set, pero, siempre existía un respeto entre todos.

“El Pelón” Solares me platica sobre el legado histórico que ha dejado el Cine de Ficheras en México. El principal legado es la diversión, mucha gente con el paso del tiempo se ha acercado a decirnos que no era un cine como decían en la época, pornográfico. Siempre habrá motivo y formas de hacer comedia porque ésta nunca va a morir, pero hay que actualizarla, buscar los métodos, los actores y los argumentos e historias. Este tipo de comedias que hicimos ya pasó de moda. Por ejemplo, Eugenio Derbez está haciendo comedia en otro estilo, mientras existan los comediantes, la comedia no va a morir nunca.

Al finalizar esta entrevista veo alrededor que hay mucha gente que reconoce al buen Pelón, y soban frenéticos las cámaras de sus teléfonos para hacerse la selfie. Menos mal que el Maestro Solares tiene tiempo ya que asistió a un merecido homenaje que le rindió el Festival 24 Risas por Segundo en el Cine Villa Olímpica, y no sólo a él, sino a todas las figuras que hicieron de los años 70 y 80 una verdadera fiesta cinematográfica con toda la picardía y sazón que nos caracteriza a los mexicanos.